Como propietario, es posible que a veces no te encuentres del todo satisfecho con el gestor de tu propiedad. Resulta difícil decidir si es hora de separarse y buscar un nuevo gestor de alquileres y como exponemos en este artículo tres cuestiones a tener en cuenta antes de decidir si cambiar o no.

Comunicación y Transparencia.

Un punto primordial que muchas empresas, sin embargo, dejan completamente de lado. 

Si te encuentras como propietario en una situación en la que no estás lo suficientemente informado sobre la gestión de tu propiedad de alquiler, procura revisar toda la documentación y los materiales entregados por la empresa gestora de tu viviendo, para comprender si ésta ha hecho promesas que no se cumplieron o si tus expectativas de comunicación quizás están sobrepasando lo mutuamente acordado.

Es posible que puedas sentir que existen dificultades para comunicarse con el gestor de tu propiedad, ya sea porque no responde o porque tarda demasiado en responder tus preguntas. 

Ten cuenta que los tiempos de respuesta varían según la complejidad de tu problema. El gestor puede estar haciendo todo lo posible para resolver tu problema, pero también puede que a su vez esté dependiendo de la respuesta y el trabajo de terceros. 

Por lo general, un ratio de respuesta apropiado conlleva 1 o 2 días hábiles e incluye al menos un mensaje de que el equipo de gestión comenzó a investigar el asunto. Es la práctica habitual en MIT House porque, como expertos en la gestión de viviendas, sabemos que la comunicación con el propietario es vital en todo momento.

Responsabilidad por errores.

Las empresas de gestión de propiedades están formadas por personas y es humano cometer en algún momento errores. Si bien no es necesario tomar una medida drástica por la omisión de un detalle en el mantenimiento de la propiedad, o si hay un pequeño error contable en tu estado de cuenta mensual, lo importante es ver con detalle cómo reacciona tu empresa de confianza cuando debe hacerse responsable de sus errores y toca corregirlos. 

Calidad del inquilino.

Otro aspecto que indica la calidad de los servicios de una empresa de gestión y administración de propiedades es cómo se evalúa a los inquilinos. 

Para asegurar un ingreso de alquiler constante, tu propiedad debe estar ocupada por un inquilino de calidad que cause el menor daño posible a la unidad sea en un alquiler de corta o media estancia. 

Un solo inquilino problemático no determina que tu administrador no esté haciendo un buen trabajo o una evaluación exhaustiva.

Todos los inquilinos representan un riesgo. No olvides que el tiempo también juega en contra de la empresa de gestión, ya que también quieren cumplir con el propietario en cuanto a números y rentabilidad del inmueble. 

Una buena compañía de gestión de viviendas se encargará siempre de seleccionar al mejor inquilino en el menor tiempo posible, para que tu propiedad genere la mayor rentabilidad posible y se mantenga en el mejor estado posible.